AFP
25 de jul de 2020
Ante la pandemia vamos a esperar de todo, incluso quienes se están aprovechando la emergencia de salud para lucrar con la salud. En el mes de mayo, el Instituto Nacional Electoral (INE) informo que se registro un notable activismo de decenas de servidores públicos, que bajo el argumento de auxiliar a la población durante la emergencia sanitaria, aprovecharon para promover su imagen personal, principalmente en redes sociales. Son muchos casos de alcaldes, diputados locales y federales y senadores que han recorrido los territorios que gobiernan o representan repartiendo despensas, cubrebocas y caretas. Después de ello, el INE dejo claro que se aplicarían sanciones a los servidores públicos que realicen actos de proselitismo bajo pretexto de ayudar a la población. Digamos que eso hizo menguar un poco, o al menos no hacerlo tan descaradamente; ya que descaradamente distribuían los apoyos en cajas o bolsas rotuladas con el nombre del servidor público que los entrega y los colores y logotipos de sus partidos políticos. En su momento los casos fueron documentados por la Unidad Técnica de lo Contencioso Electoral del INE, donde se procederá al análisis de conductas que, eventualmente, podrían ser violatorias del artículo 134 de nuestra Constitución. Ese artículo prohíbe expresamente que la propaganda de los poderes públicos bajo cualquier modalidad de comunicación social incluya nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público. Hasta ahora las cosas han menguado o probablemente quienes continuan con esa practica lo han hecho con menos descaro. Pero lo que dire a continuación, sí es una barbaridad. Porque ahora los que se aprovechan de la pandemia son los destinados a trabajar en la salud pública.
Hace una semana, Rutilio Escandón Cadenas, lanzo un discurso de honestidad pública en todo aquello que gira alrededor de la salud pública de Chiapas, todo esto derivado por información de que algunos o algunas personas de la política y funcionarios públicos siguen con la búsqueda de aprovecharse de la pandemia. Estas acciones están llevando a que los propios chiapanecos desacrediten dicha practica y para el gobernador son actos de indignación y deshumanos. Es una verdadera pena, Chiapas tiene una pobreza extrema, muchas familias con hambre y falta de salud, es injusto que los mismos destinados a salvar vidas les condicionen la salud por dinero; es una pena vuelvo a repetir que justo en estos momentos se aprovechen de la necesidad del pueblo. Toda esta situación hemos podido conocerla gracias a las redes sociales donde han declarado que dentro de los hospitales se están aprovechando de la gente vendiendo los medicamentos y equipo de covid-19 con altos costos; también han denunciado a unas personas por ser malos elementos en las clínicas de salud donde piden inyecciones muy caras para aplicársele a enfermos del covid, pero que no se las inyectan, y se las llevan a otros pacientes donde son subastadas con los familiares, y lo peor que los enfermos los que pagaron grandes cantidades de dinero para poder salvarse, como no se las aplican mueren trágicamente.
El gobernador de Chiapas, fue preciso y puntual: “Hay que decirlo, porque no somos alcahuetes de nadie. Me han hecho comentarios y hay rumores de que en algunas clínicas COVID-19 han vendido los medicamentos o piden a la gente que compre algún equipo o aparato, y no se vale porque tenemos todo en los hospitales”, expresó al tiempo de pedir a la población no caer en engaños, ya que incluso podrían endeudarse pues en el mercado negro hay sobreprecio de estos productos. Ante esta declaración del Gobernador, no nos dejémos engañar y caer en manos de aprovechadores, ya que tenemos el respaldo denunciemos, principalmente para eliminar esta mala practica. Basta de aprovecharse de la necesidad de las familias chiapanecas.