Finanza Públicas…
- EDITORIAL
- hace 6 días
- 3 Min. de lectura

Cada fin de mes, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público publica un informe que, para muchos, pasa desapercibido: el reporte de finanzas públicas. Se trata de un documento técnico, con tablas, cifras en miles de millones de pesos y conceptos que suenan lejanos, como “Requerimientos Financieros del Sector Público” o “Balance Primario”. Pero detrás de esa maraña de números está el termómetro de la salud fiscal del país. Y si bien parece un tema exclusivo para especialistas, en realidad tiene mucho que ver contigo, conmigo y con el rumbo económico de México. En este texto quiero explicarte por qué vale la pena seguir de cerca las finanzas públicas y, sobre todo, cómo entender el famoso “déficit fiscal”, que a menudo se presenta como una cifra única, cuando en realidad es el resultado de distintos componentes que se mueven cada mes y que reflejan las decisiones y limitaciones del gobierno. Las finanzas públicas reflejan, en términos simples, el balance de los ingresos y gastos del Estado. Así como en cualquier hogar se administra un presupuesto mensual, el gobierno federal también debe balancear cuánto entra (vía impuestos, ingresos petroleros, ingresos de empresas públicas, etc.) y cuánto sale (en pensiones, salud, educación, infraestructura, sueldos, programas sociales, etc.). Cuando los ingresos no alcanzan para cubrir los gastos, el gobierno incurre en un déficit, y para cubrirlo tiene que endeudarse. Si, por el contrario, los ingresos son mayores que los gastos, se registra un superávit. El punto clave es que el déficit no es necesariamente malo, pero su tamaño, su persistencia y su composición sí importan. El déficit fiscal más común que reporta Hacienda se llama Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP). Es la medida más amplia del balance del gobierno federal y sus empresas, e incluye todos los ingresos y egresos que afectan directamente la necesidad de endeudarse.

Este déficit se calcula sumando o restando los saldos de cuatro grandes componentes: El gobierno federal: es la parte más grande y conocida. Aquí se agrupan los ingresos tributarios (como el ISR o el IVA), los subsidios, el gasto social, los proyectos de infraestructura y el costo de su deuda pública. Pemex: aunque es una empresa estatal, sus ingresos y gastos afectan directamente al déficit. Si Pemex tiene pérdidas o requiere apoyos, eso se refleja en las cuentas públicas. CFE: La Comisión Federal de Electricidad también es una empresa estatal. Si bien sus finanzas han sido más estables que las de Pemex, también representa un foco fiscal si tiene pérdidas operativas o enfrenta mayores costos. Organismos y otras entidades: Incluye una gran diversidad de entidades, como el IMSS, el ISSSTE y muchas otras a nivel federal. Algunas de estas entidades tienen ingresos propios, pero también pueden requerir subsidios o transferencias. Al corte de abril de 2025, las finanzas públicas de México muestran señales mixtas. Por un lado, los ingresos públicos han crecido por encima de lo esperado, sobre todo gracias a una buena recaudación de impuestos como el IVA y el ISR. Esto ha permitido que el gobierno mantenga el control del gasto y registre un déficit menor al programado. Pero hay focos amarillos: Pemex ha vuelto a registrar pérdidas importantes. La empresa reportó un déficit financiero de más de 40 mil millones de pesos en el primer cuatrimestre del año, lo que revierte el superávit que había tenido en el mismo periodo de 2024. Esta caída se explica por una combinación de menor producción petrolera, precios más bajos y el fin de los apoyos fiscales extraordinarios que recibió el año pasado. Las finanzas públicas no son un tema lejano ni exclusivo de economistas. Son el reflejo de las decisiones más importantes del gobierno y, en última instancia, determinan qué tanto podemos aspirar a un país más justo, sostenible y con mejores oportunidades para todos. Entender el déficit fiscal no como una sola cifra, sino como el resultado de muchas piezas en movimiento, es el primer paso para exigir cuentas y construir una ciudadanía fiscalmente responsable.
Comments