La Columna: De una cosa a la otra

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Es cierto que cada vez falta menos, para que termine uno de los ciclos deportivos en Chiapas que dejarán decepción entre los deportistas y que han sido simulación de todo, sin dejar nada.

No me diga que no luce bastante conveniente, como sucedió en su momento con Aremi Fuentes en Tokio y su medalla, que ahora parezca que todos estaban conscientes de la posibilidad de que Chiapas tuviera una representante, que no fuera Fuentes Zavala, en la justa veraniega que se desarrolló en París.

Que cómo fue que hablamos de este tema, si en el Indeporte tenían un seguimiento de ella y todo lo que puedan argumentar, pero es tan sencillo reconocer que, del cielo, les cayó una oportunidad más de reconocimientos y fotos, con una deportista que, dijeron sus propios padres, tuvieron que buscar un mejor entorno de desarrollo en este deporte, los clavados.

Si realmente existiera ese seguimiento que afirman, ¿por qué no la invitaron hace un año en la exhibición de Clavados de Altura que trajo Fernando Platas?, lógico que no a competir o a tirarse desde esas plataformas en el puente Belisario Domínguez del vecino municipio, pueblo mágico y lo que quiera, pero no crees que ahí pudo la gente común, los medios y todos los demás, comenzar a identificar a una chiapaneca destacada.

Y ya revisamos todo lo relacionado a ese evento de abril en el año pasado y no existe un solo rastro de Alejandra Estudillo, que por lo menos debió aparecer en un discurso, para que se considerara entre los deportistas destacados que se tienen en la actualidad.

Es obvio que a un deportista le gusta que le reconozcan en su tierra, es lógico que buscan ser el ejemplo para los más jóvenes, de entrega y dedicación, pero también van a serlo de emigrar, porque a pesar de esos reconocimientos, en Chiapas se mantiene la tendencia de no generar entornos que beneficien al deportista y disminuyan el éxodo de jóvenes buscando mejores condiciones para seguir en el deporte.

Pero el político ve una oportunidad, aunque en el proceso haya quien distinga la incoherencia de “reconocer” a una clavadista que se tuvo que ir a otro estado para mejorar, y traer un evento de exhibición de clavados de altura, que no vio nadie y que no dejó ningún beneficio.