La Columna: Mucha polémica, pero…

Está bien, resulta a veces algo aleccionador que un suceso como el del boxeo de París 2024 aparezca para instruirnos en temas que, por lo menos en materia deportiva, encuentren aristas de las que se pueda tener un mejor panorama de esos temas, todavía tabú, que reinan en algunas disciplinas.
Que si cromosomas, que si por ahí el género y su definición biológica y todos esos asuntos de carácter científico, que al final, cuando de deporte se trata, debe reinar en el sentido común. Es complejo que se pueda entender entre tanto término y modismo científico, que una mujer puede ser mujer, aunque tenga características masculinas y tenga ventajas deportivas, no es que sea algo básico entregarle la posibilidad, integrarla por el género desde lo biológico si esto representa que será una excepción a lo establecido.
El sentido común parte desde que, por ejemplo, la Asociación Internacional de Boxeo es más específica, más detallada en ese deporte y evidentemente que tiene sus procesos y protocolos para llegar a la conclusión de que existe ventaja y aunque pueda sonar una tontería, digamos que descubren a alguien que usa sustancias prohibidas, pero como no involucra temas de “actualidad” que serán polémicos, la solución es simple.
Aquí hay una situación puntual, la condición biológica, a pesar de caminar sobre una coherente solución basada en ese rubro, le otorga a una mujer una ventaja sobre el resto de mujeres, que lejos de ser algo “involuntario”, debe considerarse como una excepción y si en el boxeo como tal, en la agrupación que conglomera a los boxeadores del mundo, lo saben, es quizá algo muy inesperado que el Comité Olímpico Internacional, por el simple hecho de no trabajar con el organismo en cuestión, obvie resoluciones a las que también se someten el resto de boxeadoras.
Las peleadoras con esta condición, por llamarlo de alguna manera, sin pensar siquiera en la discriminación o algún término de esos, que acuñamos con demasiada facilidad en la actualidad, deben tener en consideración que tienen esa ventaja “genética”, “biológica” y que no permite al resto competir en igualdad. Se supone que el boxeo tiene categorías y que son detalles obligatorios, como para dejar de considerar las ventajas de una condición biológica.
¿Ven como sin usar términos como “trans” y ese tipo de cosas, podemos caer igual en esas situaciones tan actuales?
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