- REDACCIÓN
Romper el silencio, la clave para evitar abuso infantil
Tuxtla.- Como más del 80 por ciento de los actos de abuso sexual infantil se originan en el seno familiar, es importante “romper el silencio, hablar de esto, porque hay situaciones de usos y costumbres en comunidades más cerradas, como el que el papá ‘estrene’ a la hija, lo que para ellos es normal”, aseveró Sonia Magaly Cabrera Ruiz, representante de la Red Hispanoamericana contra el Abuso Sexual Infantil.
Comentó que también será importante crear un marco jurídico para que lo sancione, lo erradique, lo prevenga y lo atienda, “porque aún no lo tenemos, y ya estamos en discusiones, y lo peor es que no todos los estados sancionan la pederastia, o las sanciones es muy pequeña”.
Incluso lamentó que con el pago de una gallina todo quede arreglado, “pero el daño para el menor será de por vida, entonces por eso insisto de que rompamos el silencio, y aquí juegan un papel muy importante los medios de comunicación, de no cubrir a los pederastas, aun sea el presidente de la República, o tu mismo papá”.
De hecho, comparó: “No puede ser que sea más castigado robarse un bolillo por hambre, o robarse una medicina porque tu hijo se está muriendo, a que le desgraciaste la vida a un niño”.
Para ella, hay situaciones complicadas, prueba de ello es que se calcula que un solo pederasta le arruina la vida a al menos 100 niños, “entonces encubrir un caso de esto, es servir como encubridor para los que vienen… por eso insisto en que se rompa el silencio y presionar a las autoridades tanto de salud, de leyes, de atención, para que tengan todo lo correcto”.
El hecho de que México ocupe de los primeros lugares en obesidad infantil tiene que ver con el abuso sexual que sufren los pequeños, advirtió la especialista, quien analizó que solo se han tratado “las puntas del ‘iceberg’: tratamos el suicidio solito, las adicciones solitas, entre otros males, pero no las causas, y unirnos todos, de lo contrario seguirán las generaciones rotas”.
Fundación Internacional Granito de Arena
México es uno de los países con más casos de abuso sexual infantil, en este marco, Chiapas albergó el Simposium Internacional Infancia, Sexualidad y Vida, organizado por la Fundación Internacional Granito de Arena.
En este espacio, Matthew Smith, investigador de Harvard, señaló que las tasas de abuso para niños con discapacidad son mucho más elevadas que las de la población en general, es decir que son de 2 a 3 veces más vulnerables de sufrirlo antes de los 18 años.
“Los niños con discapacidad auditiva e intelectual son más vulnerables, porque los abusadores se aprovechan de que no entienden bien lo que está pasando ni pueden denunciarlo para cometer el abuso”, mencionó.
En este sentido, destacó que hay menos denuncias en estos casos, por un lado porque estos niños son más dependientes de otros que el resto, y no cuentan con una red de apoyo a su alrededor, por lo que empieza el aislamiento.
Es decir, no es tanto la discapacidad que le impide reportar lo que sucede, sino que no hay nadie de confianza a quien decirle o contarle lo que les pasó, y en estos casos, desafortunados los padres desvalorizan su vida o no les creen, les prestan menos atención o piensan que están inventando disparates.
Las cifras son alarmantes, pues nos dicen que la mayoría de las niñas con discapacidad intelectual serán abusadas o violadas antes de los 18 años, y a pesar de esto, no hay estadísticas exactas en México sobre este fenómeno, solo antecedentes alarmantes.
“Nos hemos enterado de casos espantosos, como el de Casa Esperanza que salió a la luz en 2015, donde había más de 400 niños en un orfanato a cargo de mamá Rosa, muchos de ellos presentaban alguna discapacidad y no estaban registrados, o bien se reportaban como desaparecidos y eventualmente tratados, vivían en condiciones miserables y en muchos casos fueron víctimas de abuso sexual”, señaló.
El “Caso Esperanza”
Al menos cinco personas albergadas en la Casa Hogar Esperanza para Débiles Mentales fueron abusadas sexualmente, así lo denunció la organización no gubernamental Disability Rights International (DRI), que a su vez detectó casos de mujeres esterilizadas sin consentimiento para evitar embarazos en caso de ser violadas.
Como parte de una investigación de dos años para documentar la situación en que se encuentran las personas con discapacidad en la Ciudad de México, un equipo de la DRI visitó en junio del 2015 la Casa Esperanza, una institución privada situada en una zona residencial de la ciudad de México, y documentó graves abusos en contra de los derechos humanos de las 37 personas ahí detenidas.
El director informó a DRI que la mayoría de los residentes son enviados a las instituciones por diversos centros estatales del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) que pagan por su cuidado.
La ONG observó a niños y adultos encerrados en jaulas, amarrados o postrados en camas de manera permanente, y viviendo en condiciones miserables. El director del centro informó que las mujeres y las niñas en la institución eran esterilizadas porque no podían protegerlas contra el abuso sexual. Ante esta situación, el DRI presentó la información al DIF-DF.
Es de mencionar que en octubre del 2014, el Comité de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad le pidió al Estado mexicano atender urgentemente el caso de la Casa Esperanza; sin embargo, las autoridades no actuaron para detener los abusos.
Cuando DRI regresó en mayo del 2015, casi un año más tarde, con la asistencia de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), encontró que el DIF no había tomado ninguna medida y los abusos persistían.
Además, las personas ahí detenidas fueron ingresadas sin documentos de identidad, y algunas de las mujeres eran abusadas sexualmente de manera repetida dentro de la institución, por parte del personal y otros , denunció el equipo del DRI.
La investigación arrojó asimismo que el Instituto de Asistencia e Integración Social del Distrito Federal (Iasis) ha detectado al menos 25 instituciones para personas con discapacidad que representan un grave riesgo para las personas que las habitan.
Prevención, herramienta contra el abuso
Por eso, Smith considera necesario poner más atención hacia ellos, ya que en los mismos Centros de Atención Múltiple (CAM)s existen programas de educación sexual para enseñar a los niños qué es el abuso, cómo distinguir un tocamiento, a quién confiárselo si lo experimentan, y enseñar a maestros y maestras cómo identificar los indicios de esto.
Cabe señalar que muchas veces los abusadores son conocidos, familiares o profesionistas a quienes se les da la carga de cuidarlos, en escuela u hogares, por eso lo más importante es educarlos y difundir la información pertinente para desestigmatizar que el abuso es causado por el niño, ya que en ningún caso la culpa recae en él.
