- AGENCIA
Pese a todas las demandas, calera no quiere irse
Tuxtla.- Luego de que la Secretaría del Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn), afirmara que la empresa Cales y Morteros del Grijalva se trasladaría y abandonaría operaciones en la zona del Parque Nacional del Cañón del Sumidero para el 2018, la delegación estatal de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), confirmó que la empresa mantiene trabajos en la zona, pese que ya no pueda coexistir en Chiapa de Corzo.
En entrevista, Adrián Méndez Barrera, delegado estatal de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), explicó que la dependencia mantiene vigente tres demandas en contra de la calera, misma que mantiene trabajos en la zona del Cañón del Sumidero.
A lo anterior, precisó que las denuncias interpuestas por la delegación son: por daño ambiental, usurpación a la Nación y remoción de materia prima.
“Nosotros tenemos denuncias interpuestas, tres denuncias, una es por la ocupación de un bien propiedad de la Nación, otra tiene que ver con la remoción de vegetación y otro por daño al ambiente”, comentó.
Por lo anterior, reiteró que la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas sigue buscando las formas para que la empresa se traslade a Suchiapa, como se previa desde hace un par de años. “Estamos buscando eso (traslado) no puede coexistir la calera y el Cañón del Sumidero, no deben de estar así”.
Respecto a los daños y multas que se han generado por este problema, señaló que aún se mantienen las investigaciones por la FGR, por lo que no abundó sobre datos y detalles.
“Ese tema está todavía abierto para nosotros, no te puedo decir mucho más porque está en investigación, está todavía con la Fiscalía General de la República y la tenemos en el más alto nivel”, expuso.
Antes de expirar su cargo, Ricardo Hernández Sánchez, ex titular de la Semahn, fue cuestionado por este espacio informativo sobre la tardanza en el traslado de la empresa, donde precisó que el cambio de domicilio de Cales y Morteros no debía tardar más de seis años, considerando que los permisos otorgados por la delegación de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales expiraban en 2018.
“No creo que debe de tardar un sexenio, la Semarnat otorgó el año pasado un permiso que se vence este año, entonces lo que queremos hacer es asegurar que una vez que tengamos la documentación y los trabajos concluidos poder ayudar para que la empresa cumpla sus requisitos, puedan tomarse esas decisiones”, sentenció.