- ALEJANDRA OROZCO
Sin aulas y con un drenaje abierto, así estudian en la Valentín
Tuxtla.- Este jueves, alumnos, padres de familia y maestros de la secundaria Valentín Gómez Farías, ubicada en la colonia 24 de Junio, denunciaron las condiciones en que se encuentra el plantel, pues les faltan aulas, una obra de drenaje, y sobre todo maestros.
Moisés Pérez, padre de familia, señaló que desde hace tres años colapsó un drenaje a causa de las lluvias y desde entonces no terminan esta obra, además de que a raíz del terremoto de 2017, tres naves de aulas y talleres quedaron en desuso con dictamen de riesgo por parte de Protección Civil, y no les ha quedado más que adaptar aulas entre el comité de padres.
“Ese es el drenaje que se colapsó la vez pasada de las lluvias, hace tres años, dos años me parece, colapsó ese drenaje y un albañil anda por ahí, tratando de corregir el problema qué hay, se inundó, toda esta parte quedó inundada, los salones quedaron inundados y no hay modo de que lo puedan componer“.
Pero esto es lo de menos, lo más preocupante es que desde enero, los maestros interinos que no percibieron su sueldo se fueron a sus centros de trabajo, por lo que los alumnos solo tienen de una a tres clases diarias, algunos ya van a salir de la secundaria y no están preparados para la preparatoria.
Ante esto, una comisión de padres de familia se fue a México financiados por una cooperación entre ellos, para exponer la problemática ante el presidente de la República y que se les dé una solución, pues la Secretaría de Educación estatal les dice que sí van a mandar a cubrir las horas, pero no pasa nada, chocan las horas de los docentes y no se cubren en su totalidad.
“Las autoridades nos han sellado documentos de recibido, pero no hay respuesta en concreto, ha venido Protección Civil, Salud, el Inifech y nada, quizá nuestros hijos ya se van, pero otras generaciones siguen viniendo y queremos dejar algo para ellos”, dijo.
Emiliano Nucamendi es alumno de tercero, y comenta que a veces llega muy fuerte el olor del drenaje y con los salones que no tienen ventiladores o algún aire acondicionado les afecta mucho el olor, y puede provocarles algún problema respiratorio a algunos compañeros.
Por otro lado, Aracely Domínguez, madre de familia, señaló que no están teniendo clases como debe ser, pues no está la plantilla completa de maestros y ha habido “muchos accidentes, roturas de cabeza, de huesos, de todo porque no tienen un control”.
La subdirectora académica del plantel, Gladys Miceli Maza, dijo que las autoridades les han recibido los papeles y ellos cuentan con todas las gestiones que se han hecho, pero ahora exigen que se cumpla con las peticiones, pues les preocupa estar perdiendo alumnos, sobre todo en esta época de preinscripciones.
“Se firmó un acuerdo con autoridades municipales, estatales y federales en el que nos iban a construir un domo, sí lo construyeron, las bardas perimetrales de esta institución también fueron construidas, a la fecha sigue en construcción el canal de aguas pluviales pero que también se mezcla con aguas de drenaje, no han terminado y van los trabajos demasiado lento”.
También les angustia que al venir las lluvias se vuelva a inundar la escuela, porque no se ha finalizado el trabajo, además, no son espacios óptimos ni el clima idóneo para tomar clases ahí, pues incluso han aguantado el polvo y no han exigido irse a otra área para no mover a los niños, pero los gobiernos deben poner los ojos en esta escuela.
“Fue fundada en 1981, es una escuela con mucho prestigio y con egresados destacados a nivel internacional, el 60 por ciento de alumnos han desertado y ya no queremos eso, queremos que haya recurso económico para que los maestros cubran ciertos espacios”, finalizó.
