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  • RUBÉN PÉREZ

Tuxtla debe contar con su propio reglamento de construcción


Tuxtla.- De acuerdo con Jorge Ordóñez Ruiz, investigador de la Universidad Autónoma de Chiapas, la zonificación geotécnica que tiene el Ayuntamiento capitalino desde el 2008 y su reglamento de construcción, están basados en las características del suelo de la Ciudad de México.

Sin embargo, explicó que son condiciones y ambientes totalmente diferentes que deben obligar a las autoridades establecer sus propias herramientas basadas en las características propias del subsuelo de Tuxtla Gutiérrez.

De hecho, advirtió que “los tipos de suelo que hay acá son totalmente diferentes a los que hay en la Ciudad de México, donde son suelos blandos y acá no tenemos este tipo de suelos; acá son suelos expansivos, con deslizamiento de laderas”.

Bajo esas características, mencionó que es indispensable adecuar el reglamento de construcción y las normas técnicas complementarias de la ciudad para que exista mayor seguridad en las construcciones indicó el también académico de esa Máxima Casa de Estudios,

Destacó que un equipo de investigadores de la Unach logró desarrollar un software que permite obtener la zonificacioń geoestadística de Tuxtla Gutiérrez, es decir que detecta las variaciones de resistencia del y asentamientos del subsuelo de la ciudad.

Las ventajas que ofrece esa tecnología, dijo, es que ofrece información precisa de dicha resistencia del subsuelo en temporada de estiaje y en temporada de lluvias; ello permitiría que al realizar una obra de construcción se puedan ejercer con las especificaciones exactas.

Ordóñez Ruiz refirió que dicha herramienta fue el resultado de una tesis doctoral que realizó hace menos de dos años y que solamente existen dos en América Latina; una la posee la Ciudad de México y otra Tuxtla Gutiérrez.

No obstante, dijo, las autoridades municipales no han volteado a ver esa valiosa herramienta, la cual ha sido ofrecida por el investigador de la Universidad Autónoma de Chiapas; “prefieren seguir ocupando el método tradicional de zonificación geotécnica que se basa en las características del suelo de la Ciudad de México”.

“Me da mucha tristeza que para los reglamentos de construcción que realizan los municipios, no se acercan a los colegios y a las universidades para que se les asesore o se les ofrezca los productos que tienen derivados de sus investigaciones”, expuso.

Algunas herramientas tecnológicas con la que cuenta ya sea la universidad o los colegios tienen un costo no tan oneroso en comparación con los beneficios que se obtendrían al aplicarlas, detalló.

Aunque la zonificación geoestadística que posee el investigador está diseñado para la capital del estado, el software que se utiliza podría aplicarse para las ciudades más importantes de la entidad. “todo es que las autoridades municipales se acerquen”, mencionó.

Una vez que un municipio tenga su zonificación geoestadística y su reglamento de construcción, se le daría certeza a los ciudadanos a construir en zonas seguras y con las especificaciones técnicas que les ayudará a reducir riesgos, indicó.

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