A “cuentagotas”, avances de derechos de la comunidad gay

Tuxtla.- Para Juan Carlos Cuevas, consultor nacional sobre inclusión y no discriminación, sin duda se está a “años luz” de visibilizar y, aún más, reconocer los derechos de la comunidad LGBTTTI no solo en México, sino en la geografía chiapaneca.

Dijo que este reconocimiento se debe atender no sólo en el plano político electoral, sino también en el laboral, pues a nivel nacional, de 120 empresas certificadas por la EquidadMx, solo dos son entidades públicas y el resto empresas privadas.

Es decir, dejó en claro, “las únicas dos entidades públicas que obtuvieron certificación fue PEMEX y el INE, no hay ninguna otra institución de gobierno o pública que tenga este tipo de certificación”.

Ese panorama, admitió, es preocupante, pues esas dos entidades públicas representan una mínima parte de las dependencias y entidades que operan a nivel nacional; al INE y a PEMEX, sólo el gobierno de la Ciudad de México que se encarga de promover la diversidad sexual de las personas que ahí laboran.

En el resto del país ni un otro gobierno o ente público lo implementa, aseguró; “y no digo que no haya personas de la diversidad sexual que trabajen en ellos, si los hay, pero no existe esta forma de promocionar, diversificar y visibilidad a este grupo de personas, sólo esas tres entidades” reiteró.

Por desgracia, expuso el especialista en temas de inclusión y no discriminación, la invisibilidad es una forma de violencia, y este grupo vulnerable ha pasado por esa situación por muchos años. “No se podrá hablar de inclusión o visibilidad de un grupo, si no se puede hablar de una correcta integración de las personas que no son visibles socialmente. La Invisibilización es la parte más fuerte de discriminar”.

Precisó que la discriminación es normalizada en el trato desfavorale y de desprecios a determinada persona o grupo es imperceptible; y los hechos pueden ser por su raza orientación sexual, condición política pensamiento y fisionomía.

Añadió que debe existir una conciencia social y una política pública en el reconocimiento de todos los grupos vulnerables, aunque se ha avanzado en el tema, aún falta mucho por hacer.