Buscan explotar nuevos centros ecoturísticos en Chiapas

Tuxtla.- El año pasado se inauguraron tres nuevos centros ecoturísticos en Chiapas, con los cuales se busca impulsar la economía de las comunidades, a partir de procesos cooperativos, destacó Juan Guerrero Hernández, integrante del Frente de Organizaciones Sociales Independientes del Estado.

Recordó que, a partir de una experiencia operativa muy exitosa que tuvieron en la entidad, relacionada con las Cascadas del Chiflón, “logramos que, una forma de generar alternativas para el desarrollo económico de las comunidades, sobre todo campesinas, era a partir de esos procesos cooperativos, donde el trabajo colectivo sea la base”.

Además, comentó que esto tiene que permitir la generación no sólo de la economía, sino en otras áreas como la cultura, las manifestaciones artísticas, la identidad cultural, entre otros.

Esta alternativa, agregó, les ha permitido incorporar sociedades cooperativas que tienen centros ecoturísticos como “Las Guacamayas” y “Edén El Paraíso”, la primera en Marqués de Comillas y la otra en Comitán.

“Una reflexión que hemos hecho en los últimos cinco años es impulsar el trabajo cooperativo y aprovechar las riquezas naturales que tienen las comunidades en diferentes partes de Chiapas”, resaltó.

Esto les permite, subrayó, contar con un catálogo de localidades que han echado andar sus proyectos recreativos o ecoturísticos que, en una primera instancia, tienen un impacto local o microrregional, pero que, a la postre, sería estatal, nacional e inclusive de talla internacional.

Ejemplificó el caso de nuevos sitios ecoturísticos, inaugurados el año pasado, como: San Francisco La Tapa y Laguna de Zapata, en el municipio de Tzimol y de la tumba del último rey zoque, en la comunidad Ricardo Flores Magón, en Tecpatán, y “El Árbol de la Vida”, en la comunidad El Palmar, en Chiapa de Corzo.

Sin embargo, auguró que pronto echen andar otros como El Caracol, en Reforma, la Finca San Francisco El Paraíso, en Las Margaritas, y se construye un proyecto de aguas termales en Marqués de Comillas.

“Esta posibilidad de aprovechar el patrimonio biocultural de las comunidades, nos ha permitido trazar una ruta propia de la organización para promover estos espacios, con un aprovechamiento sustentable, para beneficio de las propias comunidades”, mencionó.

Confió que, con el Tren Maya, se dé un repunte en la atracción de turistas, “si bien es cierto que hay muchas bellezas naturales en Chiapas que son muy conocidas, hay muchas más, pero desconocidas, pero con un enfoque rural, de cuidado al medio ambiente, y ese es el enfoque que le queremos dar a nuestros proyectos”.

Todo este esfuerzo, dijo, se ha hecho con recursos propios, es decir a partir del trabajo colectivo, y la autogestión, y que con ello lleguen más visitantes.

Pese a que se vive un tema de inseguridad, dijo que existe la posibilidad de organizarse y de que se generen alternativas de forma integral, para que, de esa manera, no se generen esas condiciones de violencia.

“Sabemos que nos ha funcionado, y aunque no se tiene el reconocimiento de otros centros ecoturísticos del tamaño de ‘Las Guacamayas’ o ‘El Chiflón’, o del Cañón del Sumidero o de Cascadas de Agua Azul, sí tienen la capacidad de recibir visitantes, hay opciones de hospedaje, alimentos, recreación, y pues el plus de que se conocen nuevos lugares de Chiapas.