Ediberto GutiƩrrez, recordando lo mejor de San Fernando
- ALEJANDRA OROZCO
- 14 abr 2024
- 6 Min. de lectura
Tuxtla.- Ediberto GutiĆ©rrez es originario de San Fernando, a 15 kilómetros de la capital, un municipio tan cercano pero a la vez tan diferente a Tuxtla, que se ubica a 800 metros de diferencia de altura que hace que cambie radicalmente el clima, un lugar donde amanece sĆŗper rico, aunque ahorita los calores les pegan un poquito, pero no a la misma intensidad, Ć©l nació en el rancho San Francisco, a sie7e kilómetros de la cabecera, el rancho de sus abuelos, nace ahĆ y se queda a estudiar la primaria y secundaria, como no habĆa preparatoria, sus papĆ”s le echan la mano con venirse a estudiarla a Tuxtla, pero tenĆa que buscarse un trabajo porque eran de escasos recursos.
āAgarrĆ© mi bolsita al hombro y vĆ”monos a buscar trabajo, me acuerdo muy bien que en una zapaterĆa sobre la segunda poniente y sexta sur vi un letrero que decĆa, se solicitan auxiliares en despacho contable, toquĆ© la puerta del contador Arturo, no sĆ© que cara me vio y me dijo te voy a apoyar, yo no sabĆa hacer nada pero tenĆa todas las ganas, ahĆ trabajĆ© los tres aƱos de preparatoria, me ayudó mucho combinar la prĆ”ctica con la teorĆa pero era un problema, porque salĆa de mi casa a las 5 de la maƱana, se hacĆan dos horas de fila para agarrar el microbĆŗs de San Fernando a Tuxtla, pues no habĆa tantos camiones como ahorita, llegaba antecito de las 8 al despacho, estaba hasta las 2, ahĆ comĆa y de 4 a 8 estudiaba la preparatoria en el colegio Gilberto VelĆ”zquez, sobre la tercera sur y sĆ©ptima ponienteā, recuerda.
Saliendo, dice que se iba caminando a donde estaba La Fuente, ahĆ esperaba el ride porque no habĆan camiones, cuando bien le iba, en un coche, cuando no en un camión o en algo, llegaba entre 9 y 10 de la noche, lo dejaban sobre la carretera y caminaba media hora hasta su casa, atravesando el pueblo, la rivera Copalar, llegando finalmente entre 10 y 12 y a esa hora se ponĆa a hacer la tarea, porque al otro dĆa tenĆa que trabajar⦠se dormĆa a la una, dos de la maƱana y se levantaba a las cinco, esa rutina la tuvo tres aƱos y le enseñó a valorar las cosas, pues cuando cuestan y se llega a la meta se valora, cuando le entregaron su certificado de prepa fue emocionante, porque le habĆa costado muchĆsimo.
āYo le dirĆa a mi yo de la infancia que se divirtiera un poquito mĆ”s, que viviera su adolescencia, yo no tuve tiempo de vivirla, no conocĆ el cine hasta la universidad, o un antro hasta que algĆŗn amigo me dijo vamos y yo no sabĆa quĆ© era eso, mi tiempo estaba tan empleado en lograr mis metas que no me dio tiempo de disfrutar, a veces digo, quĆ© hubiera pasado si me hubiera divertido un poco mĆ”s, tal vez no hubiera tenido lo que tengo, pero sĆ le dirĆa disfruta un poco mĆ”s, la vida no solo es trabajar, pero asĆ era la vieja escuelaā, seƱaló.
En contraste, hoy dĆa ve a una juventud a la que le importan mĆ”s los likes de sus publicaciones que leer un libro, ser youtuber en vez de tener una profesión, irse a los antros antes que buscarse un pasatiempo que les pueda redituar en algo, Ć©l cree que desde ahĆ estĆ” mal la sociedad, ha caĆdo en un bache inmerso en tanta tecnologĆa, que no se sabe cómo salir de ahĆ, hoy un joven difĆcilmente agarra un libro, mĆ”s bien andan inmersos en ganar dinero a travĆ©s de los likes, les importa muy poco el mundo que los rodea, Ć©l cree que ahorita se tiene que aprovechar para hacer un llamado a la juventud de que hay otras cosas, hay mĆ”s allĆ”, por ahĆ decĆa alguien, quĆ© pasarĆa si se da un ayuno de redes sociales un dĆa, hay tantas cosas por hacer, proyectos por emprender y a los jóvenes de hoy no les importa.
āHablando de las cuestiones polĆticas, no les importa quiĆ©n va a gobernar, quiĆ©n va a ser presidente, gobernador, en manos de quiĆ©n vamos a dejar los próximos seis aƱos a nuestra sociedad, no se meten a analizar el contexto geopolĆtico, la sociedad en que vivimos, son seis aƱos, por quĆ© no hacer un anĆ”lisis, ver la trayectoria de cada personaje, elegir a quien le voy a depositar mi confianza, luego nos quejamos cuando ni siquiera nos dimos la molestia de ir a votar, el presidente actual es el que ha tenido la mayor cantidad de votos en tĆ©rminos de porcentaje de la lista nominal con el 60 por ciento, pero un 40 por ciento no salió a votar, ahĆ es donde estamos mal, todo mundo nos quejamos de la economĆa, inseguridad, pero quĆ© estamos haciendo nosotros, cada quien en su entorno podemos hacer algo, no dejarlo todo en manos del gobierno, como entes sociales en nuestro Ć”mbito podemos hacer muchas cosas, si nos pusiĆ©ramos a trabajar las cosas serĆan diferentes, hay que cambiar la dinĆ”micaā, seƱaló.
En San Fernando, hace 20 aƱo recuerda que le gustaban las maƱanas con lluvias, cierra los ojos y trata de recordar esas noches lluviosas en casa de sus abuelos, en la lĆ”mina arrullĆ”ndolo y levantarse con ese olor a tierra mojada, a montaƱa hĆŗmeda que solo puede dar la naturaleza, aĆŗn asĆ San Fernando sigue manteniendo muchos lugares bonitos, no solo es clima, hay otras cosas, todavĆa tienen la costumbre los domingos en el mercado de que bajan todas las comunidades a ofrecer sus productos: verduras frescas, animales, gallinas, guajolotes, marranos, bajan las amas de casa al centro a comprar la despensa, es una fiesta los domingos, llega mucha gente de Tuxtla o de lugares cercanos a comprar sus verduras, una tradición muy bonita.
āSan Fernando tambiĆ©n es cultura, tradición, hay una fiesta muy bonita el 2 de febrero de la Virgen de Candelaria, hoy dĆa es una fiesta que aƱo con aƱo ha ido creciendo, este aƱo desfilaron 8 mil mujeres vestidas de sombrero de charro, camisa bordada y enaguas, la fiesta es el 1 y 2 de febrero, ha ido arraigĆ”ndose y aƱo con aƱo va trascendiendo, llega gente de muchos municipios a celebrar y bailar por el centro, festejando a la virgen; tambiĆ©n es gastronomĆa, subes de Tuxtla por la CaƱada y hay muchos restaurantes de barbacoa, carne asada, quesadillas, desayunos de casa, frijolitos, huevitos, encuentras de todo, muchos restaurantes gracias a la publicidad que ellos mismos se han dado poco a poco los consumidores los llenan, el sĆ”bado y domingo sobre todo, entre semana tambiĆ©nā, aƱadió.
Dijo que su municipio tambiĆ©n es turismo, con las albercas de las pirĆ”mides, donde puedes acampar, una cueva en la comunidad CuauhtĆ©moc que es preciosa, ahĆ nace el agua, que corre un rĆo y atraviesa algunas comunidades, a los que les gusta el senderismo, acampar, hay por dónde, es un turismo de naturaleza, donde se puede estar en paz, en tranquilidad, sobre todo su gente bonita, San Fernando todavĆa es un pueblo en el que se puede confiar, que dice: vamos a votar por esa persona porque creemos en su proyecto, es un pueblo sensible, dijo que quiere mucho a su gente, a su pueblo.
āComo todos en la vida tenemos sueƱos, no me puedo quejar, en la vida gracias a Dios nos ha ido bien, actualmente me dedico a la comercialización de carne, engordamos, procesamos y distribuimos el ganado a las carnicerĆas, un sueƱo que he tenido es ser presidente municipal de mi municipio y para eso te tienes que meter en el Ć”mbito polĆtico, yo creo que es vĆ”lido, desde un lugar como esos donde tĆŗ puedes devolverle un poquito a tu gente que estĆ” tan daƱada, porque lamentablemente nuestra gente estĆ” daƱada por polĆticos que sus aspiraciones han sido diferentes a las de servirle al pueblo, que han llegado a saquear el recurso que le pertenece al pueblo, es vĆ”lido que la gente estĆ© daƱada, habemos otro tipo de personas que tenemos otro tipo de sentimientos, lo que a mĆ me mueve es poderle servir a mi puebloā, detalló.
Dijo que ha trabajado en instituciones de gobierno donde ha manejado recursos y siempre ha salido limpio, recuerda que hace nueve aƱos que participó, su padre lo llamó, un hombre muy religioso, le puso el brazo en el hombro en el patio de una casa sencilla, y le dijo que no estaba de acuerdo, pero respetaba su decisión, solo le pidió dos cosas, pues hasta ese dĆa habĆa sido pobre pero jamĆ”s habĆa manchado el apellido de su padre, los vecinos no le podĆan reclamar que le robara o le debiera a alguien, le dijo que el problema no es entrar, sino cómo vas a salir, le pidió que saliera igual, con la cara levantada, viĆ©ndole al pueblo de frente y decir: yo les cumplĆ, lo que he ganado me lo he ganado con el sudor de mi frente, y eso lo tiene bien grabado en el subconsciente, la Biblia lo dice, el obrero es digno de su salario, a mayor remuneración, mayor responsabilidad.
āYo creo que es suficiente el sueldo que uno percibe ahĆ para vivir en paz, administrarlo sabiamente a travĆ©s del ayuntamiento a favor de la ciudadanĆa, sĆ© que es un reto difĆcil porque necesidades hay muchas, pero poco a poco, paso a pasoā, finalizó, con la promesa de volver a este medio para tener una plĆ”tica mĆ”s profunda cuando sea tiempo de hacerlo.