top of page
  • ALEJANDRA OROZCO

La aventura de ser mamá: Todavía no nos vamos a maternal

Toda la emoción y expectativa que teníamos para que hoy Elisa ingresara a maternal se esfumó, porque nos avisaron el viernes que por estar cambiando el cableado de su escuela, todavía no entrara a clases hasta el otro lunes, así que todavía debemos esperar un poco para iniciar con esta nueva etapa.


Esta semana previa me he dado cuenta que prepararse para entrar a la escuela es todo un show, hay que comprar útiles, material de limpieza, cosas que uno no sabe ni dónde las venden, como las colchonetas o los mandiles, y eso que apenas va a maternal, y que todavía nos van a decir cuándo van a empezar a llevar uniforme.

El inicio de la vida escolar es un gran cambio, va a cambiar por completo nuestra dinámica familiar, ella va a empezar a convivir a diario con niños, empieza a aprender fuera de su entorno familiar, se va a enfrentar a nuevas reglas, ideologías e ideas que van a influir en la formación de su carácter.

Cuando era niña, me acuerdo que mis papás nos llevaban a escoger mochila, lonchera, lapicera, juego geométrico y todo a nuestro gusto, además de surtir las listas que incluían un chorro de libretas de distintos tamaños y formas y también libros, no me imagino cuánto se gastaban, y tampoco cómo le hacían, pero siempre nos compraban todo lo necesario y hasta más, además de los uniformes, la inscripción y la colegiatura.

Por otro lado, apenas me puse a pensar que si no fueran a la guardería o si no nos ayudara una muchacha en la casa, no tendríamos dónde dejarlas o cómo cuidarlas, o cómo le haré los días inhábiles o cuando se enfermen, son muchas cosas que a veces una no piensa hasta que le toca vivirlas, y valorarlas cuando en su momento la hija era yo.

En cuanto a las enfermedades ahí vamos… la tos sigue sin quitarse, los mocos siguen ahí, y yo ya estoy a un paso de llevarlas a un especialista y dejar de creer que es normal que se enfermen tan seguido, porque incluso estas semanas que Renata no ha ido a la guardería, la cosa no ha cambiado mucho.

Elisa ha estado súper rebelde: llora por todo, conmigo solo pelea, sigue pidiendo la chichita, creo que siguen siendo los celos y eso es lo que ya no quiero, por eso me urge que entre a la escuela, para que se vaya todos los días junto con nosotros y no sienta que la dejamos sola, mientras tratamos de lidiar con ella y prestarle más atención, aunque Renata está creciendo y también comienza a demandar la misma atención.

Renata se para y da pasitos de lado en su cuna, se mueve rapidísimo, no es un gateo como tal pero ya se mueve, además cuando la cargas se avienta para atrás como juego, balbucea bastante y ha estado levantándose por chichi mucho en las noches, es decir, estamos pasando por otra etapa en la que duermo menos de lo normal.

Es difícil barajar las cosas entre una y otra, pensamos que por llevarse poco iban a ir creciendo juntas, pero creo que eso pasará dentro de unos años todavía, pues ese año y 10 meses que se llevan son muchas etapas de diferencia, cada una necesita mucha atención y está adquiriendo nuevas habilidades y ahí vamos, poco a poco pero ahí vamos.

28 visualizaciones
Banner GOB.jpg
Banner 950x125.jpg
bottom of page