Olvia, la emprendedora detrás de Tacos Pau

Tuxtla.-  En este Universo Viole7a, contamos con la presencia de Olvia Hernández, directora general de Tacos Pau y vicepresidenta de la Asociación Mexicana de Mujeres Jefas de Empresas (AMMJE) Chiapas, pues si bien hoy la palabra emprendimiento está muy de moda, hace 18 años tomó el riesgo de crear Tacos Pau, que hoy en día es una empresa posicionada, pero empezó emprendiendo como muchas mujeres, sin duda no fue fácil, pero su ejemplo ha inspirado y apoyado a muchas mujeres y madres de familia a salir adelante.

“Lo más difícil fue aprender a maniobrar un remolque, al inicio empezamos en casa, mucha gente me observaba en las vialidades porque lo jalaba una mujer, hace 18 años introducimos por primera vez, un food truck o caseta rodante que no se había visto en el sureste; mi familia se dedicaba a vender maquinaria de uso pesado y en una ocasión fuimos a una subasta en la frontera, como buena mexicana estaba buscando qué comer, en ese lugar tan grande solo había café y pan, en eso suena una campana y nos dirigen a un lugar donde había al menos 30 remolques con muchas especialidades, lo veo por primera vez y me engancho, todo era de acero inoxidable y nos daban el servicio de comida”, recuerda.

Olvia es mamá de tres niños, en ese entonces se dedicaba al hogar, tuvo la fortuna de formarse en administración de empresas turísticas hace 30 años, de los cuales trabajó siete en Huatulco, ella es originaria de Oaxaca, pero siempre dicen que tú eres del lugar donde entierras los ombligos y aquí enterró los de sus tres hijos, agradece a este estado tener su negocio y su posicionamiento, pero la gente siempre ha sido muy cálida, ha conocido personas extraordinarias que le han demostrado que en Chiapas hay gente de bien.

“Llego, me convierto en mamá de dos niñas y siempre tuve la idea de hacer algo que me permita disponer de mis tardes para educar a mis niñas de seis y dos años, empezamos a aterrizar a la idea, yo me formé con hoteleros que no necesitaban título, se formaban como bell boys y llegaban a ser gerentes que conocían todo el manejo del hotel, traigo la mejora continua, siempre hacia adelante y ese es el éxito del negocio, tenía que sacarlo adelante, empezamos en casa, la vida te va llevando, si no me hubiera casado con un chiapaneco no hubiera conocido todas las costumbres, me empiezo a dar cuenta que es común que la gente salga a buscar el taquito, y decidí irme sobre eso, tacos suaves”, explicó.

Así, con recetas suyas, que le gusta compartir porque un experto me dijo, que para que las recetas trasciendan se tienen que compartir, no quiere que mueran con ella, ya será tu sazón el que te lleve al resultado, empezó con ocho guisos, los que más buscaba la población y se enfocó en ellos, una combinación de Chiapas y Oaxaca, además dice que cuando vayas a emprender nunca copies, porque seguro no lo vas a poder superar, recuerda haber ido al parque Morelos y ver las tortitas de huevo con camarón, las quiso copiar y nunca le salieron, pero la gente los busca mucho.

“Mi hija Paulina, por quien se llama tacos Pau, me dice, mejor hazlos como los hot cakes, agarro un sartén, lo hago y lo parto por mitad, otro muy peleado y muy simple que es típico de Villahermosa y Veracruz, es el de huevo duro con arroz rojo, es muy sabroso, es como el cochito de acá, mi cochito por ejemplo lleva tres ingredientes, uno de Chiapas, otro de Oaxaca, parecido al mancha mantel, y vinagre de manzana en vez de blanco, los clientes me han ido diciendo cómo mejorarlo, son combinaciones de lo que el negocio me ha enseñado, mi vida dio un giro cuando empecé, recuerdo muy bien que el primer día abro y a las 12 ya no tenía guisos, él movía el remolque primero, pero me enseñó a hacerlo yo”, señaló.

Dice que ha sido privilegiada, pues cuando vas caminando de manera correcta por la vida las cosas se te van dando, todo se le dio como consecuencia de que ya traía una escuela, una formación, por eso invita a que se arriesguen, ha tenido muchos tropiezos, no ha sido nada fácil, empezó en casa, fue un caos y las personas me decían que su casa olía mucho a cebolla, considera que su reto más difícil fue ir superando los obstáculos, ir aprendiendo, viendo, se le dio el negocio de manera extraordinaria, no sabía que a la vista de los demás pensaban que no era una familia chiapaneca, todo se le dio como consecuencia de la experiencia que ya traía.

“Miro hacia atrás y sí hubiera sido menos difícil si no hubiera caminado en solitario, la AMMJE te impulsa y te rodeas de mujeres que te inspiran, conozco mucha gente pero nadie sabía que yo era la fundadora de Tacos Pau, es un aprendizaje, en esta vida no tienes que dejar de aprender, tuve muchos tropiezos, si hubiera conocido antes la técnica de choque en frío por ejemplo, que se usa para el guiso al alto vacío, este año lanzaremos ese modelo de negocio, pero también nunca me acerqué, hay que tocar puertas”, recomendó.

Cuando llegó a AMMJE hace casi cuatro años, recuerda que venía de una situación de pandemia, sí vendió pero se endeudó muchísimo, conservó la mayoría de sus empleos, fue de las últimas en contagiarse pero le fue muy mal porque fue asmática, se acuerda que le decían, cierra, pero no podía porque veía las caras de angustia todos los días de sus colaboradoras y sabía que no puedo cerrar, ella hace eventos, como forma de inyectarle liquidez, de un día para otro terminan pero tuvo la fortuna de distribuir box lunch a una empresa importante, gracias a que le dieron la confianza ningún día cerraron y conservaron la mayoría de los empleados.

“En hotelería, cuando la ocupación es baja negocias, te vas un mes, te pagamos 15 días, no había venta porque no sabíamos lo que se venía, había rumores de si te contagiabas por la comida, un día tuve que sentarme con mis empleadas, el 90 por ciento de mi plantilla son madres solteras, las entiendo perfecto, cuando hay fin de curso hay clausuras y nos organizamos porque todas tienen sus eventos, ajustamos para que nadie descansara, con la promesa de que lo que se dejó de ganar se iba a remunerar cuando todo se alineara y así fue, conservamos la mayoría de los empleos”, recuerda. 

Ale recordó que ella también traía la venita del emprendimiento, tuvo un tío que emprendió, que tenía una ferretería y otros negocios, pero de ahí casi todos en su familia son maestros, ahora renta cuartos para estudiantes, tiene locales comerciales y así, ya se picó, aunque también ha tenido fracasos, pero nadie le enseñó; consideraron que no solo el gobierno debe propiciar estas condiciones, también como empresarios deben crear esos nichos, como una señora que tenía todo para hacer salsas caseras, hay emprendimientos muy buenos pero faltan acompañamientos, las personas no saben a dónde acudir y eso hace falta, ahora es una empresaria consolidada pero la asociación está impulsando a las emprendedoras, es el término de moda, es el tiempo de mujeres donde hay más apertura, apoyo.

“Todos los municipios deben crear esa vinculación, de qué se trata tu emprendimiento y te acompañamos, esta señora ya distribuye a cadenas de supermercados, gracias a ella y a la iniciativa de la instancia correspondiente, les diría que vayan a tocar puertas, a lo mejor la primera no se va a abrir pero Roma no se hizo en un día, he tenido que redireccionar cosas que no escuché o no vi, oportunidades diferentes, hay más pero hay que acercarse a las instancias correspondientes, yo llego en una mala situación pero gracias a una convocatoria para ser distribuidor de guisos al alto vacío dije de aquí soy, siempre voy por el sí aunque no sé cómo me va a ir, me contratan remolques para un evento de ciudad rural del gobernador, yo dije sí, siempre hay que arriesgarse, no intentar solo una vez, la primera que debe estar convencida eres tú, acercarte a las herramientas, las tecnologías me han costado muchísimo, pero la vida me ha guiado hacia ahí”, añadió Olvia.

Paulina aprovechó para recordar que las mujeres pareciera que no tenemos vida personal, solo laboral o pública, por eso es importante no olvidarnos de nosotras y que las mujeres sepan que este es un universo para visibilizar a otras mujeres, no solo funcionarias o políticas, sino de todos los espacios; Olvia añadió que su primer responsabilidad es hacer a sus hijos ciudadanos de bien, y cree que lo está logrando, Pau tiene 25 años y ya terminó su carrera en ciencias políticas y administración pública, Isabella tiene 19 y está iniciando tercer semestre de medicina, Emilio es el pilón, de nueve años, varón, un parteaguas.

“Soy muy bendecida, creo mucho en Dios, te nutre el alma, él llega a este mundo de cinco meses tres semanas, de menos de 900 gramos, de 29 centímetros, me impacta cuando lo veo por primera vez que tenía las orejas dibujadas, pensé que iba a ser sordo, la vida me lleva a un lugar que nunca hubiera imaginado, nace en el Regional, nos tocó convivir y tener doctores que nos salvaron la vida a ambos, hoy es un niño sano; sí creo en el amor, en las relaciones, una como mujer que fue casada y creía que era para toda la vida, se viene una ola de problemas y yo pierdo el amor a mí misma, nunca se abandonen por nada ni por nadie, lo más importante es el amor hacia ustedes y lo demás se da por añadidura, hay que estar abierta a una relación de confianza ante todo”.

Los principales puntos de venta de Tacos Pau están en La Salle, Chedraui Oriente, Bonampak, Terán y el hospital en Las Torres, de 7 a 3, si no se quieren meter a cocinar y quieren un servicio de tacos por dos horas, precio establecido, bebidas, aguas y quien les atienda no duden en llamarlos, contactarlos por redes sociales como Tacos Pau o como @olviahernandez.50 en Instagram.

“Si necesitan alguna orientación no duden en preguntar, yo comparto todo, eso necesitamos entre mujeres, apoyarnos y creer en nosotras mismas, la vida te va llevando, gracias a la asociación, busquen redes de apoyo, va a ser más fácil, crean en ustedes mismas, tenemos la capacidad de hacer muchas cosas a la vez, no renuncien a sus sueños”, finalizó.