- AGENCIAS
Pumas y Santos dividieron unidades
Pumas de la UNAM y Santos Laguna firmaron un empate 1-1 este domingo en el Olímpico Universitario y ambas escuadras aseguraron recibir en casa los partidos de vuelta de los cuartos de final en Liguilla.
El delantero uruguayo Jonathan Rodríguez, al minuto 25, adelantó a los Guerreros, pero un autogol del defensa brasileño Matheus Dória, al 63, propició la igualada en esta jornada 17 del Torneo Apertura 2018 de la Liga MX.
Con este resultado, Pumas terminó tercero de la clasificación con 30 unidades gracias a su mejor diferencia de goles dado que Santos acabó con la misma cantidad de puntos, pero en cuarto peldaño.
Pumas y Santos se midieron por el tercer lugar de la clasificación y al menos en ronda de cuartos de final, cerrar en casa, precisamente donde no les fue del todo bien a los auriazules en el certamen, aunque siempre tuvieron la iniciativa, pero no los goles necesarios para brillar.
Este domingo no fue la excepción, el Club Universidad fue una copia de sus juegos anteriores en CU, comenzó con la presión sobre el rival, tocó puerta con disparos de larga distancia, aunque sin premio en el primer lapso.
El campeón Santos Laguna mostró el oficio, sin desesperación y comenzó a tejer su juego y así se puso 1-0 con un golazo de conjunto.
El goleador y máximo asistente de Guerreros, Julio Furch, sirvió a “Jona” Rodríguez que definió de manera sutil sobre el portero Alfredo Saldívar.
Con el gol en contra, Pumas mantuvo su insistencia y antes del descanso acarició la igualada. El juvenil Diego Rosales quedó de frente al guardameta Jonathan Orozco, pero le faltó experiencia para liquidar y luego Víctor Malcorra cimbró el travesaño en dos ocasiones claras del local.
Como terminó, empezó el segundo capítulo, los universitarios con el balón en los pies y los de la Comarca Lagunera a la espera de otra genialidad de sus referentes en ataque para liquidar.
Con empuje, pero sin tino, tuvo que ser un autogol lo que ocasionó el empate 1-1 de Pumas cuando Matheus Dória no escuchó al cancerbero santista, peinó el balón y éste techó al propio Orozco.
