Fortalezas y retos de México

La medición internacional del Índice de Progreso Social (IPS) 2024 revela una panorámica multifacética para México, mostrando tanto los logros como los desafíos que enfrenta en su camino hacia una sociedad sostenible y próspera. Este instrumento, que complementa indicadores económicos como el Producto Interno Bruto (PIB), ofrece una perspectiva más amplia sobre el bienestar social y la capacidad de un país para ofrecer oportunidades a sus ciudadanos. Incluyen tanto esos elementos materiales que cubren las necesidades básicas, como también los aspectos sociales e institucionales que permiten a las personas alcanzar su pleno potencial. Analizando brevemente los resultados de México en cada uno de los 12 componentes que miden, a través de 57 indicadores, junto con el progreso social en 170 países, se pueden ver resultados mixtos y algunos retrocesos: La educación avanzada en México muestra su puntaje más bajo: con 40.67 puntos, se encuentra en una encrucijada, con una posición global de 78 entre 170 países y una disminución anual en el puntaje; se esperaría fuera un tema prioritario dada la importancia del talento humano para la generación de valor económico y bienestar. Por otro lado, la educación básica mejora ligeramente y obtiene 80.66 puntos, posicionando a México en el lugar 83 a nivel mundial, reflejando un avance en la construcción de las bases de una sociedad educada, pero con el reto de mejorar la calidad de esa educación. A pesar de un aumento en la posición global en salud con 51.21 puntos, México se enfrenta a retos significativos en este ámbito, situándose en el lugar 100, afectado principalmente por el acceso a servicios de salud de calidad. Tiene un puntaje más alto en nutrición y cuidados médicos con 86.92 puntos, en el lugar 76, y México evidencia avances en aspectos esenciales para las necesidades básicas de su población, aunque aún con retos en mortalidades maternas e infantiles. En contraste, Dinamarca está en el componente de salud en la posición 13 y 81.48 puntos, y en el de nutrición y cuidados médicos obtiene la posición 14 con 93.85 puntos. La calidad ambiental mantiene un puntaje estable de 56.97 puntos, colocando a México en la posición 92, y se ha mantenido en esos niveles por los últimos 10 años, lo que indica un estancamiento en este componente esencial para la sostenibilidad ambiental con debilidades en temas como reciclaje y especies protegidas, donde ocupa posiciones de 138 y 123 de entre 170 países. La alta puntuación en vivienda, 86.25 puntos y una posición de 81, destaca la disponibilidad de infraestructura básica, aunque la mejora continua es esencial para el bienestar de los ciudadanos. Y va de la mano con el componente de agua y saneamiento, que aunque con una ligera disminución respecto al año anterior, aún refleja una posición favorable en el lugar 66 y con 88.10 puntos, indicando la tendencia de invertir en infraestructuras esenciales para la población. México muestra un notable progreso hacia una sociedad incluyente con 64.42 puntos, clasificándose en la posición 50, siendo el componente donde mejor posición obtiene y uno de los de mayor aumento respecto al año pasado, lo cual refleja esfuerzos en la lucha contra la desigualdad y el fomento por la inclusión social, pero con retos en el área de la libertad y elección, con una posición de 71, teniendo como alertas la corrupción y el matrimonio adolescente.

Sin embargo, en el componente de derechos y voz está en la posición 96 y en seguridad obtiene un preocupante lugar 109; ambas son áreas que requieren atención prioritaria para garantizar un entorno propicio para el progreso. No se puede construir prosperidad si no se garantiza a la mayoría de la población el acceso a instituciones que den certidumbre jurídica y que velen por un Estado de derecho que proteja a las personas garantizando su libertad y seguridad. Mientras que en información y comunicaciones, siguiendo las tendencias mundiales, presenta una caída preocupante de casi 2 puntos, situando a México en el lugar 64 con 74.90 puntos. Este comportamiento se da por la libertad de prensa, donde se encuentra en el lugar 118 de 170 países y el porcentaje de usuarios de internet que es menor al que tienen países con el nivel de ingreso similar. El Índice de Progreso Social de México en 2024 pone de manifiesto la complejidad de lograr un desarrollo integral en el país, y como lo ha evidenciado México, ¿cómo vamos? al medir el IPS a nivel estatal, la complejidad es aún mayor al considerar las 32 realidades estatales. Pero estos datos también proveen una guía invaluable para enfocar esfuerzos y recursos en las áreas más críticas. Y que quede claro que no se pretende sustituir a la prosperidad económica, al contrario, se debe propiciar un crecimiento económico que se transforme en progreso social.