La Columna: Hay que revisar a detalle
- Annete Lewis
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Lo que en su momento era un evento que complementaba el Sistema Nacional del Deporte, junto a la Olimpiada, la Universidad, Juegos Populares y en evento en turno, el Encuentro nacional Deportivo IndÃgena, que su origen era para que las etnias originarias, pudieran competir deportivamente hablando, pero con el paso de los años y con esa viveza que tiene el dirigente, encontrando las lagunas en el reglamento que les permita tener una ventaja, aunque eso vaya en contra del espÃritu de la competencia, se dan ciertos excesos hasta tergiversar un evento de esa forma.
Y aunque hay quien pueda argumentar que es la evolución del deporte en México, basta con echar un vistazo a la etapa estatal de este evento en Chiapas, en el que el nivel deportivo no varÃa tanto; es decir, no es tan alto como para una Universiada, pero tampoco es el nivel que normalmente se acostumbraba ver entre los indÃgenas nativos.
Hay un tema que terminó por abrir el candado y es que, hasta hace un par de lustros por lo menos, para poder tomar parte en este evento, los participantes debÃan comprobar que hablaban el dialecto de su etnia y con eso ya se podÃa jugar; en la actualidad, si a alguien, aunque sea de alto rendimiento, le encuentran un apellido que pueda tener raÃces y con eso basta, aunque el atleta sea ya hasta profesional, puede integrarse a estos equipos y el evento, como tal, ya diluyó su origen.
Es raro que los representantes de las etnias que defienden tanto sus derechos, se permitan entre ellos el lujo de dejar que se tergiverse de esa forma un evento que debe ser para ellos; sin embargo, es ahà donde el ganar ya admite todo, los dirigentes, los delegados, los entrenadores y en la mayorÃa de los casos, hasta los atletas, permiten que se haga flexible un reglamento que, sÃ, tiene esas lagunas que han permitido que el Encuentro Deportivo Estatal ya no sea tan indÃgena, como cuando se dio la mestización y evolucionamos como sociedad, alejándonos de ciertas costumbres y tradiciones que, a pesar de eso, se han mantenido vivas.
Queda claro que ganar está por encima de todos, aunque los Encuentros de este tipo, deberÃan fusionarse con los Juegos Populares, que parece cada vez equiparan más su competencia.




