top of page
  • EFE

La megasequía por el cambio climático y la deforestación se agudizarán en América Latina

Cartagena.- Los fenómenos meteorológicos extremos y los impactos del cambio climático, como la megasequía, el deshielo o la deforestación seguirán agravándose en América Latina y el Caribe, afectando la salud, el desarrollo y el suministro de alimentos, alertó este viernes la Organización Meteorológica Mundial (OMM).



En el informe "El estado del clima en América Latina y el Caribe", presentado este viernes en la ciudad colombiana de Cartagena de Indias, la organización alertó de las "profundas" repercusiones que tienen los fenómenos meteorológicos extremos en los ecosistemas, la seguridad alimentaria e hídrica, la salud de las personas y la lucha contra la pobreza.


"Desafortunadamente, se prevé un agravamiento de los impactos en la región, ya que la atmósfera y el océano siguen cambiando rápidamente", algo que alterará el suministro de alimentos y agua, y hará que pueblos y ciudades estarán expuestos a riesgos cada vez mayores y la salud y bienestar de las personas se verán afectados "negativamente, al igual que los ecosistemas naturales”.


Este documento que se publica anualmente confirmó que "la tendencia al calentamiento en América Latina y el Caribe" continuó en 2021: la tasa media de aumento de las temperaturas fue de aproximadamente 0,2 grados centígrados por década entre 1991 y 2021, frente a los 0,1 grados por década registrados entre 1961 y 1990.


El informe añade que los glaciares andinos han perdido más del 30 % de su superficie en menos de 50 años y la "megasequía" que azota la zona central de Chile es la más pertinaz del último milenio.


A todo esto se suma que el nivel del mar en la región "continuó subiendo a un ritmo más rápido que a escala mundial", algo que amenaza "a un porcentaje muy importante de la población”.


Entre 2020 y 2022 se produjeron en la región 175 desastres, y de ellos el 88 % se debieron a causas meteorológicas, climatológicas o hidrológicas, convirtiéndose en la causa del 40 % de las muertes registradas debidas a desastres y del 71 % de las pérdidas económicas.


La temporada de huracanes del Atlántico de 2021 fue la tercera más activa de la que se tiene constancia en esa cuenca, al haberse registrado 21 tormentas con nombre (incluidos siete huracanes), y fue la sexta temporada consecutiva de huracanes en el Atlántico por encima de lo normal.


DEFORESTACIÓN Y PRECIPITACIONES EXTREMAS


Las tasas de deforestación fueron las más elevadas desde 2009 y ello no solo perjudicó al medioambiente, sino que además socavó las iniciativas de mitigación del cambio climático: en la pluviselva amazónica brasileña se duplicó con respecto al promedio de 2009-2018.


En 2021 se perdió un 22 % más de superficie forestal que en 2020, mismo año en el que las precipitaciones extremas ocasionaron crecidas y deslizamientos de tierra, dejando importantes víctimas mortales y altísimos daños materiales.


Todas estas afectaciones se traducen a su vez en un aumento de las migraciones y los desplazamientos de población, así como en la inseguridad alimentaria: 7,7 millones de personas en Guatemala, El Salvador y Nicaragua experimentaron altos niveles en 2021.


Los riesgos hidrometeorológicos "han causado la pérdida de cientos de vidas, han ocasionado graves daños en la producción agrícola y las infraestructuras y han provocado desplazamientos de población", alertó el secretario general de la OMM, Petteri Taalas.


En este sentido, el agravamiento del cambio climático y los efectos derivados de la pandemia de covid-19 "no solo han afectado a la biodiversidad de la región, sino que también han estancado décadas de progreso contra la pobreza, la inseguridad alimentaria y la reducción de las desigualdades", agregó Mario Cimoli, de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

14 visualizaciones
Banner GOB.jpg
Cambio climático 950x125 copy.png
bottom of page