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  • ALEJANDRA OROZCO

Urban Coffee, la realización de un sueño

Tuxtla.-  Edgar Ángel es originario de Montecristo de Guerrero, su familia es cafetalera desde hace más de 70 años, el es ingeniero agrónomo especializado en catación, pues teniendo una marca hay que aprender marketing, economía, contabilidad, estudio de mercado; Montecristo es el último municipio de la frailesca, colinda con Mapastepec, Luis Vidal, Jaltenango, y es un municipio 100 por ciento cafetalero, con poca producción de maíz, tiene una altitud promedio de mil 200 metros sobre el nivel del mar, mientras que su rancho va de mil 300 a mil 800 metros, es un clima muy apto, ya que el café es de clima tropical, manejan exclusivamente café de altura, al estar en la zona de amortiguamiento de la reserva El Triunfo, donde sí se pueden hacer labores culturales, no ven seguido al quetzal, pero saben que está ahí.

“Llevo cinco años con la empresa, me dedico a la agronomía, con apoyo de mis padres, me dieron una carrera y mi padre decía: te espero en el rancho para aumentar la producción, pero fui aprendiendo y viendo otro campo, trabajaba como coordinador de zona en Sistema producto café, desde octavo semestre sabía que tenía talento para esto, estuve cinco años después de la carrera y tenía el sueño de poder decir: nuestro café vale, es de calidad, yo lo regalaba con amigos y expertos y decían: qué buen café, un día dejé mi trabajo, ya había comprado tostadora, máquina, molino, entonces dije ya está, el nombre fue otro tema, lo puse en inglés, la casa tostadora se llama Urban Coffee y ahora somos Chiapas Street Black Coffee”, señaló.



Se han caracterizado por romper esquemas de etiquetas tradicionales, en mercados buscan Estados Unidos, deja el trabajo y cuando empieza al 100 lo cuestiona su patrón por dejar todo por un sueño, se me fue a Jaltenango y al mes de emprender y soltar empieza la pandemia, después de ese mes se quedó con todas las cosas en su casa, hasta él tenía pánico, aún así quiso encontrar el lado positivo y vio que todos estaban en el teléfono, sin querer queriendo por la necesidad de saber cómo estaba la familia, qué pasaba en salud, en otros estados, le empezó a apostar ahí e investigar más cómo funcionaba, sus amigos preguntaban y él estaba vendiendo, bien protegido, desinfectado todo, la gente pedía su café, como una primera necesidad, ahí fue el boom, empezó a dimensionar que hay muchos canales de venta, hoy en día regresa a las actividades más tranquilo, aumentaron los canales de venta, incluso su negocio es hijo del COVID.


“Existe el problema de la mano de obra en Chiapas, existimos más de 400 mil familias que dependemos del café, más del 10 por ciento de la población de Chiapas, el primer problema antes de pandemia era que utilizábamos mano de obra 100 por ciento guatemalteca, el quetzal vale más que el peso, entonces empezaron a migrar a Canadá y Estados Unidos, al igual que un mercado muy grande en Cancún que también se quedó sin mano de obra y empezamos a ver que no estaba llegando la gente, con pandemia menos, las restricciones de fronteras, siempre hay maneras pero no es igual, desde el medio de producción el primer problema es la mano de obra, gente que ahorita no va a levantar cosecha por falta de gente lo va a vender, este relevo generacional no solo en la política, los jóvenes también están migrando”, dijo.

Es así como dice que el chiapaneco se va a Estados Unidos, muy pocos tienen la posibilidad de estudiar en otros municipios, cuando inició el tema de la marca, jóvenes de su pueblo se acercaban a preguntarle cómo le hizo, también ha batallado, como todo emprendimiento siempre hay que innovar, ese es el punto a favor, visualizar al futuro, pues si nos quedamos con las cosas de antes, alguien ya lo hizo o lo está haciendo y ya está posicionados, hay mil cosas que se pueden hacer con el café, dar otra cara, otro servicio, cosa que hicieron, tiene demasiadas ideas, como un instituto de catación, cómo emprender, que tengo que aprender para tener un café de especialidad, muchos jóvenes desde la producción en cafetales, hay papás muy cerrados pero él fue probando, le encanta producir café pero había una necesidad de buscar otros canales de venta.


“Yo pensaba atacar el mercado con el precio, devaluaba mi trabajo y todo lo que venía atrás por querer vender, pero somos muy visuales, nadie más que tú tiene que hablar de tu producto, plantear la problemática y la solución, hice una investigación muy amplia, con los pies sobre el suelo, he trabajado con chicos del Tec regional para un proyecto y me fue muy bueno contar experiencias, aprendí, me retroalimenté más y supe la situación actual de los jóvenes, es un ganar ganar, hay que mostrar más canales, no solamente producir café, mucha gente no sabe qué es un barista, una profesión muy bonita”, señaló.

En 2022, durante el Festival del Café, vio la convocatoria y sabía lo que traía, le entró, preparó su muestra, los jueces eran unos amigos de San Cristóbal muy buenos, se le hizo importante, ganando el Premio Taza Sabor entre los cinco mejores cafés de consumo, eran más de 300 muestras, enviaron de grandes marcas de todo el estado, iban a mandar un correo, pasó la fecha, estaba nervioso, tenía una corazonada, le llega el correo de que había sido seleccionado y la llamada, significando todo el trabajo de la región, de su familia, una satisfacción demasiado grande, la gente lo probaba y no sabía cuál era cuál, lo probaban y decidían, premiaron a todos pero el fue el único en la frailesca, había uno de Yajalón, Las Margaritas y San Fernando, fueron los únicos cinco finalistas, después de eso en lo personal y en el trabajo fue un boom, lo voltearon a ver muchos negocios y empresas importantes, le empezó a meter más, buscar personas, lo escuchan hablar en un parlamento, lo ubican porque domina bien el tema y lo invitan a una gira de parlamentos en el estado para la ley del café, ahí pudo ver la situación actual de Chiapas en la cafeticultura, que no es la misma en las diferentes regiones.

“No se ha podido generalizar un proyecto para todo el estado, me marcó la vida, conocí muchos líderes y amigos del café, la gente me preguntaba cómo le hice, qué hacer, fui conociendo gente y marcas, vi que hay muchas estancadas y mi visión cambió, no solo para mí, sino para una comunidad grande que quiere llegar y vender, se presenta en el Congreso de la Unión, una experiencia extraordinaria, Chiapas tiene el primer lugar, mejor calidad y a veces acabamos tomando café soluble, vimos el problema y lo quisimos mejorar, tengo 33 años y mi generación prefiere café natural, los jóvenes de 15 van a preferir el soluble, pero una gran cantidad sí busca lo natural, es una gran comunidad de emprendedores, si hay para todos, el café siempre es vendible, yo puedo vender y el de a lado también vende”, añadió.

Lamentó que hay empresas gubernamentales que el gobierno se ha limitado a apoyar, eventos a nivel mundial que ni siquiera llevan al productor, sino al comercializador, si se va a representar a Chiapas en otro país, por qué no llevar a uno de zona indígena, costa, frailesca, que conozcan; y es que piensa que no sabemos tomar café en Chiapas, podríamos hacer festivales de café, sin embargo en el sureste acabamos tomando soluble, pero en el área metropolitana del país hay otro mercado de café de especialidad que es como los vinos, empieza una trazabilidad de decir el tipo de maduración exacta, grados brix, cantidad de azúcares, todo es medible, la temperatura, sale el honey, enmielados, un mercado de especialidad donde el kilo no te cuesta 300 ni 400 pesos, tiene un precio muy alto, pero el chiapaneco no paga 800 pesos por un kilo de café y ese mercado todavía no es para el sur.

“En Guadalajara hay una barra de especialidad, pides tu café lavado, de Jaltenango, tipo de extracción, de 70 hasta 100 pesos la taza, son tazas pequeñas, ese mercado está creciendo enormemente, conozco un barra que tiene más de 200 en Estados Unidos, es la segunda bebida más consumida en el mundo, hay que estudiar el mercado, en Chiapas no pega ese tipo de negocio, hay que darle otra cara, en un estado donde todo mundo vende café, aún así me he posicionado porque me he empeñado, al producto y al candidato hay que enseñarlo, si te quedas estancado y no lo das a conocer, al tiempo lo vas a agradecer, es muy complejo, en México hay una empresa que ha monopolizado los precios de Chiapas y Centroamérica, si se cotiza en bolsa de valores les vale, ellos van a establecer sus precios, ni con quien pelear, tenemos un tema con ellos, mucha gente no tiene donde vender, si está en 100 ellos te lo compran en 30”, añadió.

Incluso aquí en Tuxtla ha encontrado un canal muy grande, aunque alguien ya vendió, qué tal que tú vendes, no todos arriesgan, él implementó la distribución en pandemia, hay gente que le vende café y dejaron su otro trabajo, un tema nuevo para ellos y para él, ha estado un paso adelante en marketing, y es que el café en tiempo de anaquel tiene hasta siete meses, los malos se añejan, pero alguien sin experiencia no lo nota, crea esta red de distribución donde puede asegurar que subiendo publicidad a las historias, por lo menos tres kilos ya vendiste, esa era la prueba más grande, gente que todavía le sigue comprando 20 o 30 kilos para vender, el que no sabe vender aprende.

“Mi marca es un sueño, yo estudié en el Cobach, y estaba mucho lo de culturas urbanas, hip hop, rap, grafiti, me gustó tanto, yo soy de rancho, quise unir mis raíces con mi gusto, primero nos llamábamos Café Hacienda San José desde 1930, me sonaba muy tradicional pero seguí y empiezo con Urban, Urbano, la etiqueta fue desde cero, me hizo muy creativo el dibujar, encuentro un buen diseñador, mi amigo Lalo, le digo quiero esto pero digitalizado y él ya tenía la experiencia para otras marcas, llegamos a esto, con solo ver la marca o la imagen dije, de aquí es y el resultado más grande, el café es de contacto, si les gusta lo compran, en Vips la gente veía y quedaba con la duda de la bolsa, la imagen está vendiendo sola, quedé muy satisfecho porque se hizo algo desde cero, con ideas innovadoras o raras, sin embargo hay mucha gente malinchista, que no compra productos que no sean en español, pero nuestro café es de los más vendidos”, se congratuló.

Los encuentras en Facebook e Instagram  como Chiapas Urban Coffee, o en TikTok como Chiapas Street Black Coffee, actualmente son patrocinadores de un piloto de motocross, se salieron de lo común, también están colaborando con la línea aérea Volar Chiapas, trata de hacer colaboraciones donde ganen todos, su café ha llegado a España, París, Canadá, Estados Unidos, Honduras, Guatemala, le vendió a una persona que maneja un Airbnb, hablar del café son demasiados temas y no hay medios de comunicación que hablen de eso, por eso seguirá difundiéndolo.

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