Antuna debe aprender
- AFP
- 21 abr 2021
- 2 Min. de lectura
Annete Lewis

Desde que un jugador comienza a priorizar sus tatuajes y su corte de cabello, o debe llamarse Messi o de plano su destino no es el futbol. Tampoco debe serlo una pasarela, porque su “look” no pasa más que por alguna sugerencia de algún cercano que no tiene idea de imagen y esas cosas.
Las declaraciones de Uriel Antuna, que señalamos hace algunos días, le costaron 50 mil pesos de multa; una cosa es ser sincero y otra muy distinta no conocer lo que van a provocar tus palabras y más cuando tu equipo, al que se minimizó sin contemplaciones, atraviesa un momento bastante complicado y el rendimiento de quien declara, tampoco es el más destacado de su equipo.
A la par hay que analizar cuánto costaste, porque tampoco te puedes querer poner minimizar la crítica si no haz estado a la altura en este tiempo en el que te pusiste la playera del equipo más popular del país y que su trascendencia alcanza mucho más allá. Chivas no es un equipo cualquiera y en México, cualquier cosa que no sea vestirse de rojiblanco y ganar, no hay forma de justificar nada.
Pero, volvamos al origen, dejemos quizá un poco atrás el tema Antuna que, seguro, medirá sus palabras de aquí en adelante, aunque en el verano pida salir y encuentre un “mejor destino”, es triste pero va a pasar con seguridad; sin embargo, recuerden a las últimas grandes figuras del Guadalajara ¿Rodolfo Cota?, ¿Rodolfo Pizarro?, ¿Alan Pulido? (conste, dije figuras, no históricos), quizá en el último caso, Pulido era extrovertido, más que Pizarro y Cota, pero en la cancha era de los que sobresalían o como pide la afición de vez en vez, ponía huevos y eso es lo que ha creado una añoranza por el delantero, que dicho sea de paso, se fue como campeón de goleo de Chivas.
El último que quizá era extrovertido, fue Adolfo Bautista, pero quién en Chivas le quita al “Bofo” el estatus. En la cancha, Bautista no escatimó esfuerzo, fuera un juego de pretemporada, o una final, un torneo en Estados Unidos o la misma Copa Libertadores; es decir, no hay problema con que tengas un peinado raro y luzcas tus tatuajes, siempre y cuando tu rendimiento sea el que requiere el equipo.
Parece que Chivas deberá encontrar como parámetro, jugadores que dejen en segundo plano el blog del futbolista profesional, que lo primero que hace es platinarse el cabello y hacerse los tatuajes posibles y entre más grandes mejor; es quizá un tema como lo que sucede con los Yankees en la MLB, no te permiten barba ni cabello largo, pero esa evolución no ha llegado al Guadalajara, no le encaja y en eso habrá que comenzar a fijarse a la hora de contratar.
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