Dani, artista y emprendedora de las uñas

Tuxtla.- La emprendedora invitada en esta ocasión es Daniela, una chica que trata de mantenerse bastante ocupada, originaria de Tuxtla Gutiérrez, a sus 26 años, inició su propio emprendimiento en el rubro de la manicura y las uñas, no tiene mucho que decidió emprender, apenas en abril hizo un año que se le dio la oportunidad, que la hace sentir muy feliz y plena.

“Estudié mercadotecnia hace cinco años, aunque al principio no estaba convencida, esa intriga de cuando sales de la carrera y dices, y ahora qué, con el paso del tiempo esta misma actividad me ha solicitado utilizarla, nunca me sentí lista para escoger una carrera en específico, apenas estaba saliendo mercadotecnia pero nunca investigué, sin embargo no me arrepiento de mi decisión”, dijo.

Dani fue una niña muy feliz, en su infancia siempre estuvo acompañada de su hermana, con quien tiene recuerdos muy bonitos, quien es casi nueve años mayor que ella, su infancia fue bastante consciente, no fue como ir descubriendo cosas sola, sino guiada, fue la nieta, sobrina e hija menor por mucho tiempo, siempre muy mimada.

“A mi hermana le tocó ser una niña muy responsable antes de tiempo, aún así le agradezco que hasta el día de hoy sea una mujer que sigue pendiente de mí, nunca me ha dejado de ver como su hermana menor, respetando ese margen de que ya soy adulta, la amo muchísimo y siempre estaré agradecida con ella”, compartió.

Ella soñaba con muchas cosas, recuerda que quería ser de todo, nunca le pasó por la cabeza dedicarse a lo que hoy se dedica, sin embargo lo toma como que ahora juega con muñecas reales, se la pasaba metida en sus juegos y con lo que soñaba era con ser estable, a pesar de no saber a qué se quería dedicar, un día quería ser veterinaria, al otro chef, siempre quiso ser feliz con lo que hacía y cree que lo logró.

“Me dedico a esto desde hace tres años, empecé a trabajar en un lugar al que le tengo muchísimo cariño, tuve una jefa increíble que me dio la oportunidad de aprender, entré casi en ceros, pero tuvo esa paciencia y me dio la oportunidad, mis ganas de mejorar y perfeccionar estaban, yo salía a las 8 de la noche y a las 9 en mi cuarto tenía mi mesita, empezaba a comprar material poco a poco”, relató.

Así, tuvo su primera clienta, se fue pasando la voz, chicas del otro lado de la ciudad llegaban a ella para que las atendiera a las 9 de la noche, siempre estaba esta intriga de por qué la buscaban, si por el horario, le faltaba creer en ella, así, de atender una cita a la semana ya tenía todos los días llenos, aprendió a mejorar ciertas cosas que la técnica requiere, pero también ya había un desgaste físico que no le permitía rendir bien al 100 al otro día.

“Gracias al apoyo de mi mamá y mi abuelita, que tenía un local que ya no se usaba desde antes de pandemia, se me ocurrió comentar que me gustaría invertir en él, mi mamá no lo terminó de escuchar, yo sin dinero en mano ni nada y me dijo, yo te regalo el piso, ahí también yo me comprometí, eso fue el primer año, ya el segundo que seguía trabajando me dediqué a ahorrar, a visualizar qué quería, siempre he sido muy miedosa en aventarme a tomar decisiones, llevaba unos meses con mi novio y me dijo, ya deberías decidirte, date cuenta que tú eres la única que no cree, ya tenía algo ahorrado pero no me había tomado el tiempo de cotizar, en material el segundo año ya no invertí porque el primer año ya lo tenía de las clientas que atendía en casa, faltaba materializarlo, y hasta el día de hoy aquí estoy”.

En este sentido, su carrera ha sido una herramienta muy padre, a pesar de que no estaba totalmente convencida, había cosas que le gustaban, en su caso fue la materia de diseño y fotografía, en diseño le enseñaron mucho identidad corporativa, sabía que quería crear identidad con sus clientas, que las hiciera sentir que era su esencia, esa parte le ayudó muchísimo, también la parte de poner sus reglas es algo que le ayuda mucho, siempre le dice a sus clientas que así puede atenderlas con todo el tiempo que se merecen, al igual que la siguiente cita, eso le ha ayudado mucho a establecer una identidad, y cierto parámetro para atenderlas como se merece cada una.

“Estoy sobre el libramiento sur y 16 poniente, colonia Burocrática, mi negocio se llama Dani Nail Room, recién le cambié el nombre, porque ya tenía todo, los colores, el piso, el diseño de la página, y un día platicando con una amiga me dijo que daba ciertas vibras y le puse Vibes, pero me di cuenta de que también era mi imagen y era algo personal, escuchaba a las clientas decir, es que sigo con Dani, ahorita le digo a Dani, nadie le decía Vibes, entonces cambio el nombre, porque solo me dedico a las uñas y es un espacio pequeño, y le puse room evocando a cuando atendía en mi habitación al principio, estoy en Instagram como @dani.nailroom_, atiendo de lunes a sábado, pueden agendar sus citas por WhatsApp al 9613695254 para mejor gestión de los mensajes”, dijo.

Aunque tiene respuestas rápidas a través de la app para negocios, para agendar tiene cierto protocolo, te pregunta nombre, qué tienes pensado, fecha, si traes algo para retirar, si es la primera vez, eso le ayuda a destinar un horario cómodo para ambas, que no interfiera con la siguiente clienta y poder limpiar el área, para recibirte como mereces, por lo regular son mujeres, solo ha atendido dos hombres, uno de ellos un gran amigo, por lo menos un 70 por ciento son clientas que ya acudían con ella y el resto son nuevas que han ido llegando gracias a Dios.

“Me dedico a las uñas esculturales, me gusta mucho hacer diseños, siento que las mismas clientas piden la técnica, como el relieve, me gusta mucho hacer solo gel, yo no utilizo esculturales, que es a base de un material que te permite moldear para extender la uña natural, personalmente no utilizo eso pero lo piden, disfruto mucho la manicura, el antes y después del cuidado de la uña, cualquier diseño que me sienta capaz de hacer, una de las cosas que más disfruto es esa libertad creativa que muchas clientas me dan, de que me traen una imagen, pero una debe estar segura y ser honesta, de decir no cuento con el material para este elemento o no conozco la técnica, pero si me permites podemos experimentar y que se parezca lo más posible”, dijo.

De aquí a nueve años, aunque ahorita disfruta mucho el tiempo que pasa a solas, le gustaría en algún momento generar empleos, contar con un equipo, principalmente porque tiene clientas que le agendan y gracias a Dios tiene espacio hasta la siguiente semana pero le da pena, le gustaría brindarles el agradecimiento por elegirla, pero también esa apertura de agenda, poder satisfacer todas las necesidades de la persona que trabaje con ella, como capacitaciones, que no se quede nada más con lo que sabe, sino brindarle esa oportunidad de crecimiento como lo hicieron con ella.

“Un consejo que mi ex jefa me dio, fue siempre actualizarme y capacitarme, pero también importa mucho que seas curioso, hay muchos métodos de aprendizaje, así como muchas personas aprenden físicamente, hay cursos físicos incluso aquí en la ciudad, pero también existen cursos en línea, hay una diferencia abismal en precio, es cuestión de buscar, que te interese aprender algo nuevo, y aparte la cuestión de las redes sociales, hay que sacarle jugo, muchas cosas que he aprendido las he visto en TikTok, realmente aprendes mucho, sinceramente también es importante capacitarnos”, recomendó.

Siempre fue una chica que probaba mil cosas y nunca completaba nada, ya fuera dibujar, cocinar, bordar, cuando descubrió este entorno también estaba pasando por una situación emocional difícil y fue su escape, que poco a poco le exigía, aparte empezó a conocer otras técnicas con chicas que trabajaban bellísimo, es lo que la mueve, querer mejorar, a veces checa en su galería y ve fotos de cuando empezaba, nada que ver con lo que hace ahora, aunque aún considera que tiene mucho por aprender y mejorar, el móvil fue que se demostró a sí misma que tiene la capacidad de ser constante y enfocarse en lo que le gusta.

“Independientemente al rubro, es una decisión de mucha valentía y disciplina, van de la mano, no es fácil, muchas veces se viene la temporada alta o baja, en lo que le agarras la onda, y la temporada baja para ti no lo es para otros rubros, tienes que tomarte el tiempo y la paciencia de conocer tu negocio, el rubro, déjense ayudar, ese ego o vergüenza también importa, nos dejemos ayudar, aconsejar, toma las cosas de quien viene, que sea de personas que realmente admiras, te quieren y se preocupan por ti, no pierdas la calma, a veces estamos bien, a veces medio dormidos, pero si te esfuerzas y eres constante los resultados vienen”, mencionó.

Finalmente, le dio muchísimas gracias a su familia por todo el apoyo que siempre le han brindado, ellos fueron los primeros en creer en ella cuando estaba dudosa, gracias por siempre apoyar a esta niña que quería hacer de todo y no se decidía por nada, hasta que agarró su camino, nunca desistieron, espera seguir teniendo su apoyo, ella poder apoyarlos y que sea mutuo.