Sin hacer corajes
- AFP
- 14 ago 2019
- 2 Min. de lectura
Annete Lewis

Como recomendación, este espacio no tiene la intención de ser laxante para quienes aquí se mencionan; no es necesario confirmar que no se trata de un tema personal, aunque haya quien pretenda aportar información para hacer señalamientos de ese tipo, normalmente aquí se habla del dirigente y sus acciones, que pueden ser regularmente condenables.
Pero que por aquí puedan leer algo que les parezca una especie de ataque, no, lo mejor es absorberlo con filosofía y analizar que sus acciones (normalmente malas), son demasiado evidentes. Porque hasta eso de tener malas decisiones y disfrazarlas tiene su chiste. La política es el escaparate que deja de manifiesto el mínimo error, quien no tenga conciencia de eso al intentar ocupar un puesto político, ser servidor público pues, no está listo y deberá replantear sus deseos.
Ser porristas le ha resultado a algunos, porque el dirigente es muy dado a buscar tener cerca el elogio fácil, el aplauso sencillo y que adula, la palabra que estimula y que se piensa sincera, pero solo es comparsa.
Ser servidor público no es un grado nobiliario, no es un súper poder que te coloque por encima del resto y que te convierta en un ser superior. Es una responsabilidad en la que, la prioridad principal, es servir. En deporte no es la excepción, la responsabilidad es mayor si el antecedente que se tiene para ocupar ese puesto, es haber sido una deportista de élite; es quizá eso lo que causa mayor sorpresa, en Chiapas se ha buscado que no se tape tanto la serie de anomalías que ha cometido Tania Robles como directora, pero con las redes sociales, cada vez es más sencillo que se pueda evidenciar lo que hace mal.
Lógico es también que existan los jilguerillos defensores que saben las bondades de acompañar en este lapso, no deben hacer corajes tampoco porque ya saben que, como en todo, para todo mal existe el bien y viceversa, todos suelen estar del lado que les conviene, de acuerdo al dirigente en cuestión.
En fin, el asunto es que no deben hacer corajes y mejor aplicarse a fungir en lo que les corresponde, es decir, no se puede en su momento señalar y después convertirse en señalados y permitirlo, se supone que una cosa debe llevar a la otra, o sea, si señalaban a quien hacía mal, no pueden hoy defender a quien hace mal, en ese caso incumplen con el sentido común, eso si, sin corajes porfa.
IMAGEN DEL DÍA
Una combinación grata
Modelo, artista y escritora, además de amante de los deportes, la estadounidense Myla Dalbesio posó para Sport Illustrated y nosotros descubrimos este diamante. Tú puedes protagonizar este espacio, envía tus fotos a deportes@sie7edechiapas.com.mx; no se publicarán fotos anónimas.












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