top of page

Solo no lo ven bien

  • AFP
  • 9 sept 2020
  • 2 Min. de lectura

Annete Lewis


ree

Cuando uno ve los números de Cristiano Ronaldo, no queda más que quitarse el sombrero; el portugués no se cansa de demostrar su nivel goleador y los dos tantos que consiguió en estos duelos europeos entre selecciones, lo rememoran como aquel que apuntaba para llegar al Real Madrid, dos tantos que detallan a CR7, lo enganchan de nuevo en un momento en el que el futbol está convulso.

No hay necesidad de conseguir otras cosas, los trofeos puede que ya no entren en la sala de los equipos que le han visto con su camiseta, porque algo pueden tener asegurado, Cristiano no únicamente se entrega al máximo, el portugués contagia, obliga y exige que el resto esté a la par, lo que se traduce en rendimiento, en trabajo, sinónimo de triunfo casi siempre.

Pero justo en el momento previo al arranque del futbol normal, arrancó Cristiano, tomó el balón lo colocó en el césped para hacer regresar el tiempo unos varios años atrás, no importa el color de la playera, póngale la que usted guste, tomó su postura acostumbrada, arrancó y cobró de manera magistral, ya hay menos potencia en el cobro, quizá por consejo de los especialistas con los que ha estado en el último par de años, que le respetan y le ayudan a mejorar. La comba fue el dibujo perfecto que termina con un grito de gol. Ya había alcanzado los 100 goles con su selección y podía echarse a la hamaca y comenzar a ver quién será el que lo intente; pero es Cristiano, volvió a exigir, a correr, a buscar el espacio y el balón. Justo encontró la redonda y volvió a levantar la vista, ante una defensa que sabía iba a poder hacer poco de nuevo, porque el portugués vio su sitio favorito, la red y se decidió a volver a colocar al balón ahí. Hasta los portugueses en su casa dibujaron una sonrisa, como la comba que volvió a dibujar la pelota arrancando un segundo grito.

No hay explicación lógica para odiar a Cristiano, tendrá que ser el inusitado fanatismo comparativo que se ha vuelto en la “comida” de muchos. ¿Quién es mejor?, ¿a quién le importa tanto como para dejar de disfrutar a uno de ellos?

En fin que Cristiano tuvo otra gran tarde, cada vez parece más entrado en años, pero más preciso, más contundente y la madurez ante cualquier situación adversa que le ha restado “odiadores”; con Cristiano novelas pocas, goles muchos y alegría en el campo de futbol multiplicado por millones de sonrisas.

El futbol parece encapricharse en mantener a Cristiano en un hábitat que le exige y el aficionado debe darse por satisfecho, el atacante sabe, se siente cómodo con eso y siempre surge para mantener en calma a una oleada de seguidores que se empeñan en hacerlo menos.


IMAGEN DEL DÍA


En gran nivel

Aunque no pudo con Serene, María Sakkari va dando buenos pasos en el tenia femenil; de Grecia para el mundo entero. Tú puedes protagonizar este espacio, envía tus fotos a deportes@sie7edechiapas.com.mx; no se publicarán fotos anónimas.



Comentarios


251128 950x125.jpg
251128 950x125.jpg
Estar Consiente.jpg
bottom of page